Kori es un niño sordo, vive en un campo de refugiados saharauis, le gustan los camellos e ir a la escuela para aprender a leer y escribir. El día que su maestra entiende que puede enseñarle a escribir, algo muy especial sucede en su vida: es capaz de plasmar en el papel sus emociones, especialmente aquellas que surgen de su relación con su amigo Caramelo, un pequeño camello color canela.