Campo de guerra analiza la tendencia geopolítica encabezada por Estados Unidos de América, que, con el pretexto de combatir el terrorismo en el mundo, ha impuesto el control y la vigilancia a partir de plataformas militares, y ha impulsado el orden paulatino de grandes corporaciones mundiales, cuya sinergia en el espionaje absoluto se ha revelado en los últimos tiempos. El modelo de control y vigilancia fue insertado en la comunidad internacional mediante la ideología ultraliberal, la apertura de los mercados, la economía globalizada y las sociedades de la información. De modo paralelo, la democracia formal hizo creer que, a través del pragmatismo por encima de las normas constitucionales de cada país, podría avanzarse para realizar un gobierno planetario bajo la bandera de «la libertad y la democracia». Este ensayo documentado e inquietante explora esa geopolítica que aprovecha la inestabilidad social, los cárteles de la droga, la represión del Estado y el paramilitarismo para sentar las bases de un dominio integral. Un atisbo al mundo del mañana que comenzó a ser hoy.