La historia oficial siempre sostuvo que Carlos de Austria, primogénito de Felipe II, murió el 24 de julio de 1568, víctima de una repentina enfermedad propiciada por sus desajustes mentales y el largo encierro padecido en un torreón del Alcázar de Madrid. La realidad parece ser otra. Un manuscrito silenciado por la historiografía de los siglos XIX y XX-atribuible a un fraile llamado Joan Avilés-nos depara una colosal sorpresa: el heredero de la Corona fue sometido a un juicio criminal secreto. Diez años de laboriosa y paciente investigación sobre la vida de Don Carlos y las características del documento descubierto soportan esta novedosa aportación historiográfica, realizando además una minuciosa paráfrasis del manuscrito donde se demuestra la veracidad de los hechos revelados.