En la actualidad se observa con carácter general, pues existen excepciones muy sonadas en España, una práctica fluida en torno al control judicial sobre el procedimiento arbitral y sobre el laudo que se aprecia en la capacidad concedida al árbitro para juzgar la validez de su propia competencia o en la admisibilidad de mayores cotas de arbitrabilidad y en una apreciación ponderada de las causales de anulación. Los linderos entre el ejercicio de la autonomía de la voluntad y el necesario control judicial son variables, pero tienden a estrecharse dentro de un debate doctrinal inacabado y de una práctica jurisprudencial heterogénea que, sin embargo, evidencia un debilitamiento del control ejercido por el juez estatal sobre el procedimiento y sobre el laudo. De la delimitación adecuada de estos linderos depende la existencia misma de la institución arbitral. Ana Fernández Pérez Licenciada y Doctora en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid. Premio extraordinario de doctorado. Profesora de Derecho internacional privado de la Universidad de Alcalá de Henares. Árbitro del Consejo Arbitral para el Alquiler en la Comunidad de Madrid. Autora de tres monografías y más de cuarenta publicaciones entre artículos científicos y capítulos de libro. Ha realizado diversas estancias de investigación en Universidades extranjeras. Ponente y conferenciante en numerosos congresos y seminarios internacionales. Una de sus principales líneas de investigación es el arbitraje comercial internacional y el arbitraje de inversiones.