Victor vive con los sentimientos a flor de piel. Artesano de las palabras, es un apasionado del rock. Le gusta, además, hincharse de gominolas con su mejor amigo, y le divierte esconder el papel higiénico del baño de las chicas. El colegio siempre ha sido para él como hacer " puenting " pero sin cuerda. Hasta que un día, Marie-José, que padece una enfermedad degenerativa, irrumpe en su vida. Ella es un auténtico cerebrito; él, algo vago y mal estudiante. Ella quiere disimular su enfermedad hasta conseguir su sueño: entrar en una de las mejores escuelas de música; él necesita orden en su vida. Cuando se encuentran, un universo totalmente nuevo se abre ante ellos.