Londres tiene algo que ofrecer a todos: desde arte hasta fantásticos museos, arquitectura deslumbrante, esplendor real, diversidad, maravillosos parques y un dinamismo incontenible. Rebosa de historia, pero sin dejar de innovar en cultura y creatividad. Su carácter cosmopolita la convierte en la ciudad probablemente más internacional del mundo, sin perder su esencia británica.