Cuarto sucesor de San Pedro, nació hacia el año 60 en el seno de una familia judía asentada en tierras griegas. Recibió educación judía y aprendió en los liceos helénicos. Convertido al cristianismo, viajó a Roma donde destacó por sus conocimientos de la Sagrada Escritura, ser docto en la predicación y humilde en el servicio. El 27 de julio del año 108 sucede a Anacleto como Papa de la Iglesia. Muere mártir hacia el 117.