Una letra de heavy metal cualquiera:

Nombre:
Puntuación:

Álbum: 15-03-2006-16:00:34
Grupo: masacre

Letra: una flor sobre mi tumba
Idioma español

Slow!!!

Y las iglesias con sus altares de oro
y población en tugurios al frente de los suburbios
al frente ellas se pudren en el dinero y sucias
riquezas mientras los hombres se arrastran
en el fango de la fe que carcome los
cerebros de los cerdos, donde está la humildad?

Doctrina…
mueca…
sin lengua…
Quién habla?
Quién peca?
Quién miente?

El estiércol sobrepasa
las ideas que pisotean
el estiércol pisotea hoy

Y las iglesias con sus altares de oro
y poblaciones sobre los tugurios
al frente de las sucias catedrales
ellas se pudren en el dinero y riquezas
mientras los hombres se arrastran
en el fango de la fe que carcome los cerebros
de los cerdos, doctrina, la humildad
sencillez y entrega, enseñanzas

Ahora la voluntad eterna
será siempre eterna
Que hará la muerte
cuando ya nada
haya sobre el mundo?
Extraído de

Continúa este TEXTO ARGUMENTATIVO

Y otro grupo:

Álbum: Antichrist Superstar
Grupo: Marylin Manson

Letra: La gente bonita (The beatiful people)
Idioma Español

No puedes ver el bosque por los árboles
no puedes oler tu propia mierda en tus rodillas
No hay tiempo para discriminar,
odia a cada concha de su madre que se te atraviese
¡Oye tú! ¿Qué es lo que ves?
Algo lindo, ¿algo gratis?
¡Oye tú! ¿Tratas de sobresalir?
Si vives con imitaciones, es difícil estar limpio.
Los gusanos vivirán en cada hostia
Es difícil ver cual de todos come más No te quiero y no te necesito
No te molestes en resistir, te golpearé
No es tu culpa que siempre estés equivocado
Los débiles están ahí para justificar a los fuertes
La gente bonita, la gente bonita
es totalmente relativa al tamaño de su campanario

La gente horrible, la gente horrible
Es tan anatómica como el tamaño de su campanario
El capitalismo lo ha hecho de esta forma
El anticuado fascismo se lo llevará lejos.


Hace años que Ratzinger pide purificar al rock pesado de mensajes diabólicos

El flamante Pontífice ha dicho en varias ocasiones que este tipo de música es la «expresión de pasiones elementales» y que no es amigo de las iglesias. También ha asegurado que el pop es «el culto a la banalidad».

Es un amante empedernido de la música. Pero de la clásica. El nuevo Papa, Joseph Ratzinger, adora escuchar a Amadeus Mozart, y a Ludvig van Beethoven. Dicen que puede pasar horas escuchándolos y tocando el piano. De hecho, estudió música en su Alemania natal y sabe ejecutar ese instrumento muy bien.

Pero desde hace once años, el flamante Pontífice insiste en que a su entender el rock «debe ser purificado de los mensajes diabólicos».

Así lo sostuvo el día de Santa Cecilia (protectora de los músicos) durante una misa celebrada en la iglesia de San Carlo en Roma, el 22 de noviembre de 1994.

En la música, añadió, «hay muchas cosas buenas, pero ocurre que en ciertas ocasiones que el rock duro no es adepto para las iglesias».

Sobre el mismo argumento, aquel que era por entonces el prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe escribió en el libro «Introducción al espíritu de la liturgia», en febrero de 2001: el rock es la «expresión de pasiones elementales, que en las grandes reuniones de música tienen una relación de carácter cultural, esto es de contracultura, que se opone al culto cristiano», mientras el pop es «un culto de la banalidad».

El rock, añadió, «quiere liberar al hombre de sí mismo en el evento de masas y en el desarreglo mediante el ritmo, el rumor y los efectos luminosos, haciendo precipitar a quienes participan en el poder primitivo del Todo, mediante el éxtasis de la laceración de los propios límites».

El pop, «no es más sostenido por el pueblo en el viejo sentido, sino ordena a un fenómeno de masas, producido por métodos a escala industrial y debe ser definido como culto de la banalidad».

La música que se inspira en el espíritu «parece tener pocas posibilidades» en el mundo del rock, donde «el Yo se transformó en una cárcel, donde el espíritu se convierte en una cadena y la rotura violenta de ambas parece ser la verdadera promesa de liberación, de quien, al menos por algunos instantes, cree haber probado el sabor».

El guardián de la doctrina católica habla del rock y del pop en su libro en el capítulo dedicado a «Música y liturgia», en el cual resalta la importancia de la música en la Biblia y en la tradición cristiana.


Los Grandes Peligros del Rock

La obsesión del rock, al perder su condición de moda para escalar sucesivamente la idolatría, el rito, el uso social y la psicosis colectiva y carecer de contrapartidas inspiradas en la música saludable y reconfortante, se ha convertido, con el SIDA, en otra pandemia de fin de siglo.

Introducción

«Nada influencia tanto los valores y costumbres de la gente como la música» (Shu Ching, siglo VI A.C.). Ya desde las épocas más antiguas se conocían los efectos benéficos de una suave melodía sobre el estado anímico del ser humano. Músicas modernas como el rock, y más especialmente su versión «heavy metal,» producen el efecto contrario sobre sus oyentes, haciendo que personas tranquilas entren en un estado de euforia, violencia, agitación y furia. El «rock & roll» data de hace unos cuarenta años y en este lapso esta música ha tendido cada vez más hacia las pasiones. David Gergen caracteriza esta evolución de la siguiente manera: «la diferencia entre el rock de ayer y el rock de hoy se puede comparar con el salto de las modelos en trajes de baño de la revista «Sports Illustrated» a las fotos de mujeres desnudas en las revistas pornográficas» (USA Today, Oct.11, 1985). Hoy día, la pasión por la música rock se ha convertido en una suerte de movimiento mundial que cuenta con cientos de millones de seguidores. Para muchos jóvenes la música rock, y sobre todo su versión más agresiva —el «heavy metal»—, se ha convertido en un estilo de vida que fomenta la amoralidad, el uso de drogas, la violencia y el nihilismo.

El poder de la música

La música es una de las artes más inspiradas: sus ritmos, melodías, armonías, su dinámica, la contraposición de sonidos y su colorido permiten expresar un sinnúmero de sentimientos y estados anímicos. Su poder radica en que penetra directamente el alma y el subconsciente sin pasar por la mente y produce determinados estados anímicos. De acuerdo a su contenido, la música tiene el poder de inspirar los sentimientos más nobles y elevados, como por ejemplo, la oración, en el caso de la música sacra, o por lo contrario activar los deseos más perversos y oscuros.

El filósofo griego Platón (427-347 AC) dice en su obra «La República» que Dios creó en el hombre la predisposición a combinar sonidos no de una manera aleatoria cualquiera, sino copiando las armonías del mundo espiritual. Aristóteles (384-322 AC) señala la importancia de la música en la educación de los jóvenes. En su obra «La Política» dice: «la influencia de la música es tan grande que sus distintas formas y géneros pueden clasificarse de acuerdo a sus efectos sobre el carácter del ser humano». M.S. Bothius, un musicólogo del siglo VI, escribió: «La música es parte de nuestro ser: puede enaltecerlo o actuar negativamente sobre su conducta». A.W. Tozer dice: «Si escuchas y te gusta la mala música, tu vida interior va a languidecer hasta morir» (The Closing of the American Mind, New York, Simon & Schuster, 1987, págs. 68-81).

Experimentos médicos en la actualidad han demostrado la influencia positiva que tiene la música clásica sobre el proceso de curación de las personas. Sobre ello escribió el Dr. Clyde L. Nash (Jr). cirujano del Hospital San Lucas de Cleveland, Ohio. En tanto el Dr. Mathew H. M. Lee, Director del «Rush Rehabilitation Insitute» del Centro Universitario de Medicina de Nueva York dice: «Podemos afirmar que la música tiene un efecto benéfico por cuanto ayuda al fortalecimiento de la salud de los pacientes, disminuye el tiempo de su internación y las complicaciones de sus enfermedades.» Por supuesto «la música no tiene propiedades mágicas» -dice un especialista en musicoterapia del Deforia Lanede Cleveland- «pero tanto en el hospital como en la casa, la música es un fuerte remedio tanto para jóvenes como para ancianos» (Artículo «Music´s Surpirising Power to Heal» en el Reader´s Digest de agosto de 1992, número que aporta otros documentos sobre el provecho de la música tranquila).

En los últimos años se ha escrito en diversas publicaciones estadounidenses sobre experimentos acerca de la influencia de la música sobre las plantas y se ha demostrado que la música tranquila ayuda al crecimiento y desarrollo de algunas plantas y flores mientras que la música violenta hace que decaigan. En Alemania se ha implementado el uso de la música tranquila durante el ordeño de las vacas. Tales experimentos señalan que no sólo los humanos reaccionan ante la música. El Dr. Howard Hansen, ex-Director de la Escuela de Música de Eastman, escribió en el American Journal of Psychiatry (tomo 99, pág. 317): «la música es un arte particularmente difícil de entender y tiene innumerables connotaciones emocionales. Contiene muchos elementos y, dependiendo de sus combinaciones, tiene el poder de tranquilizar o de energizar, enaltecer o degradar y vulgarizar, acercarnos a la meditación o a la violencia. Es una potente fuerza tanto para el bien como para el mal» (USA Today, 11-10-1985). La música no sólo es entretenimiento sino también una cierta forma de prédica.

Siempre expresa la cosmovisión de los compositores y puede ser un arma muy fuerte tanto para el bien como para el mal. Si bien cada persona tiene el derecho de elegir la música que le guste, debe ejercer el sentido común y la objetividad en el momento de evaluar una producción musical. A la hora de elegir el nacionalsocialista debe saber distinguir entre lo bueno y lo malo tanto en la música como en el cine, la literatura y el arte en general. Hemos de ser muy críticos en estos tiempos de total decadencia. En todas estas esferas es frecuente la mezcla de lo bueno y lo malo pero la convicción nacionalsocialista siempre tiene que ser la guía para trazar la línea divisoria.

El efecto estupefaciente del rock & roll

Los compositores contemporáneos del rock están de acuerdo en que su música tiene una enorme influencia. (La mayoría de los datos, referencias y citas que se mencionan a continuación provienen del libro «The Facts on Rock Music» de John Ankeberg & John Weldon, Harvest House Publishers, Eugene, Oregon, USA, 1992). Frank Zappa escribió en la revista Life: «son muchas y sutiles las formas en que la música influye en los estados anímicos de las personas… La música y la luz fuerte tienen un gran poder de adoctrinar» (Life Magazine, 28-6-1968). Slash -el principal guitarrista de Guns N´ Roses- dice: «esto es muy serio: mi música influencia y guía a un montón de gente que no conozco… Lo que más me asusta es saber que tengo tanto poder» (Eric Homberg, The Hell´s Bells Study Guide, Gainsville, El Reel to Reel, 1990). Hal Ziegler, uno de los pioneros del rock, ya en la década del cincuenta escribió: «Comprendí que esta música les llega a la gente joven porque su ritmo se corresponde con el ritmo de sus cuerpos. Supe entones que nada ni nadie logrará sacarle esta música de adentro […] La llevarán adentro toda su vida» (Life Magazine 28-6-1968). Los padres no tienen que despreciar la enorme influencia de la música de rock sobre sus hijos. En el período de la infancia y juventud se forma el sistema de valores en el ser humano. Los psicólogos especializados en el ámbito de la influencia de la música en el hombre han expresado varias veces sus reservas acerca de la música de rock.

Las observaciones del famoso psicólogo John Kappas demostraron que las personas «son muy susceptibles a todo lo que se dice en forma de canción. Y por el camino de saciar los sentidos la música puede llamar al oyente a la excitación o a la melancolía. Cada vez que esté sobrecargado su parte consciente, la persona va a percibir todo lo que se les sugiera en ese momento porque ha perdido su autodefensa. La gente deja los conciertos en un estado extrema receptibilidad. La música tiene la peculiar característica de debilitar el pensamiento y crear estados de ánimo. En ese momento las sensaciones exteriores se asimilan fácilmente» (Allan Bloom, The Closing of the American Mind, New York: Simon and Schuster, 1987, 68-81). La influencia de ciertas formas de rock-and-roll es tan seria que las leyes en muchos estados de los EE.UU. exigen que en las tapas de álbumes de música y videos musicales potencialmente dañinos haya una evaluación competente de su contenido (Howard C. Nielson, miembro del Congreso, carta del 19 de Abril de 1990).

Más de 19 estados están analizando seriamente proyectos de leyes que obligarían a establecer prevenciones acordes para prevenir a los consumidores. Asociaciones del tipo National Teachers Association, American Academy of Pediatrics y US Surgeon General expresaron sus preocupaciones con respecto a la influencia negativa de ciertas canciones contemporáneas. En la discusión de proyectos de ley por este tópico se establecieron los siguientes hechos:

1. Desde el mismo momento del nacimiento de la industria del cine sonoro la palabra y la imagen (por separado, pero también y sobre todo juntas) ejercen una profunda influencia sobre la comunidad y sobre los individuos tanto de manera positiva como negativa.

2. Ciertos tipos de música y videos permiten ratificar los sentidos indignos y malas conductas por medio de la inculcación, la aprobación, la justificación y el aliento de la violencia, el vandalismo, la violación, el homicidio, la drogadicción, el suicidio, los sacrificios humanos, la degradación de la mujer, de los niños y de la especie humana, la bestialidad, el sadismo, el masoquismo y otras depravaciones.

3. Semejante material amoral en su mayoría está orientado hacia la juventud durante la edad de mayor susceptibilidad.

4. Este material se puede adquirir en casi cualquier lugar y a cualquier edad siempre que haya dinero. (Copia del proyecto legislativo, 101- Congreso, segunda sesión, con la resolución adjuntada por Howard C. Nielsen, miembro del Congreso, 42390-1). Al igual que los psicólogos, los médicos se están ocupando también de la influencia negativa de la música rock sobre la juventud. La investigación aportada en el «Journal of the Medical Association» (del 22 de Septiembre de 1989) concluyó: «Desde temprana edad los jóvenes deben comenzar a desarrollar los estándares de su conducta y consensuarlos con los estándares de los adultos… En este contexto la música —un enorme estímulo en la vida de los jóvenes— se orientó hacia una dirección dudosa. Las letras de algunas canciones, saturadas de inmoralidad y de contenido belicoso, entran en franco conflicto con las enseñanzas de la generación adulta con respecto a la mesura y a la conducta racional… Los doctores tienen que tener en cuenta el significado de la música en la vida de la juventud y aprovechar los gustos musicales de la gente joven en calidad de indicador de su salud emocional y mental» (Elizabeth F. Brown y Wiliam Hendee, «Los adolescentes y su música: Introspección en la Salud de Adolescentes» Journal of the American Medical Association, 22/29 Sept. 1989, pág. 1659).

En el libro «The Closing of the American Mind» el conocido sociólogo Allan Bloom expresó su preocupación por la influencia de la música rock sobre los niños, los jóvenes y los estudiantes. El Dr. Bloom confirma que la juventud que tiene una noción inmadura del sexo no puede desarrollarse normalmente. Por el contrario la música rock la bombardea a la fuerza con propaganda de sexo adulto e incluso perversiones y la empuja hacia una conducta sexual perversa. Y esto es asimilado cuando su comprensión del amor, de la responsabilidad y del mutuo deber de los esposos se encuentran aún en estado de desarrollo. Según la opinión de Bloom, la música rock en la cultura americana socava la autoridad de los padres en cuanto a la educación moral de los niños (Bloom, «Closing of the American Mind» pág. 73-76). Un especialista en el tema escolar con gran experiencia en trabajo con adolescentes difíciles afirma: «Durante mi prolongada dirección de gente joven tropezaba constantemente con el problema de la influencia de su música sobre ellos. Varias veces observaba en las actitudes de la gente joven el reflejo de la conducta amoral de sus ídolos musicales.

La juventud manifestaba su absoluta devoción hacia ellos utilizando de sus expresiones, anotando los títulos de sus canciones en los libros, decorando las habitaciones con sus fotografías, escuchando a todo volumen sus canciones en los automóviles e imitando su forma de vestir» (in Media Update, Nov.-Dic. 1989, pág. 2-3). Al Menconi, consultor escolar y especialista en música rock, asevera: «Es muy penoso que la mayoría de los jóvenes cristianos, con los cuales me relaciono, son más devotos a su música que a Cristo. La música es el idioma de la generación contemporánea… Yo pensaba que comprendía la fuerte influencia del medio que los rodeaba hasta que vi personalmente de esta influencia por la experiencia de mi hija Ana de 12 años. La presión sobre ella para seguir la forma de vida de músicos de grupos de rock como Bon Jovi, Guns N´Roses y cantantes como Bobby Brown, Madonna y George Michael fue extremadamente fuerte… Los jóvenes como mi hija se identifican constantemente con sus ídolos del mundo del rock, que determinan su perspectiva del mundo y su sistema de valores. Este sistema de valores determina a su vez la esencia de sus sentidos. La juventud actual no sólo escucha música sino que la siente profundamente.

La música pasa a ser la sustancia de sus vidas» (revista Media Update, Sep.-Oct. 1989, pág. 1-2). Es instructivo conocer hechos documentados, recopilados en una de serie de entrevistas en MTV «Rockumentary» con los grupos influyentes de la música rock. Aquí con toda evidencia se puede observar la forma de vida autodestructiva de los líderes del rock: consumo de narcóticos, perversión sexual, alcoholismo, nihilismo, hedonismo, rebelión, anarquismo y ateismo. Así, por ejemplo el 3 de Agosto de 1991 los músicos del grupo «Motley Crue» confesaron su conducta libertina, que se transformó en algo común en ellos. Su conducta descendió a un nivel tan bajo, que ellos finalmente comprendieron con toda claridad que tenían que elegir entre dos alternativas: entre cambiar de raíz su forma de vida o prepararse para la muerte… Lamentablemente no todos entienden esto y la forma de vida autodestructiva de las estrellas de rock sigue contagiando a la juventud. Independientemente de la actitud que tiene cada uno hacia la música rock, no se puede negar la influencia dominante de esta música en el punto de vista y las actitudes de los jóvenes. Los videos de rock, sus conciertos y sus revistas son una enorme prédica, que la juventud consume con avidez. Rock y sexo Los hechos demuestran que la música rock estimula el libertinaje sexual.

De acuerdo a la revista «US News and World Report» del 19 de Marzo de 1990 «actualmente existen 13 grupos de rock con nombres de órganos sexuales masculinos, 6 con nombres de órganos sexuales femeninos, 4 con variantes de la palabra esperma, 8 relacionados con el aborto, uno relacionado con una enfermedad del útero, 10 grupos con nombres en honor a diversos actos sexuales y 8 incluyen en sus denominaciones palabras relacionadas con obscenidades». No es infrecuente ver en videos de rock escenas de sexo interracial u homosexual, glorificandose la mezcla de razas, la homosexualidad y la decadencia. Muy posiblemente es el judaismo el que está detrás de ello (no olvidemos que gran cantidad de autores de canciones rock son judíos), tratando por este medio de corromper a la juventud blanca. La música rock contemporánea está saturada con elementos del acto sexual extramatrimonial, infidelidad matrimonial, sadismo y masoquismo, homosexualidad, violaciones y necrofilia.

No es infrecuente que las canciones incentiven a realizar actos sexuales con quien uno quiera. Por ejemplo, las canciones «Sexual Healing» de Marvin Gaye, «Body Language» de Queen, «I want your sex» de George Michael, «Chemical Reaction» de Madonna, «Still of the Night» de White Snake, composiciones del homosexual Prince e innumerables otras similares propagan el libertinaje sexual. Es evidente que en las creaciones de la mayoría de los compositores de rock-and-roll la perversidad está disfrazada y se presenta como algo atractivo. Paralelamente se produce la total degradación de los sentidos de: mujer, madre, señorita y novia. Todas ellas se transforman en objetos de una impetuosa pasión sexual animal. Por ejemplo «Eat me alive» (Cómeme vivo) y «Judas Priest» (Judas Sacerdote) cantan al éxtasis sexual que llega a la depravación cuando obligan con un revolver a otros a satisfacer sus deseos. Para no avergonzar al lector saltearemos otras citas que documentan esta faceta de la música rock. (John Ankerber and John Weldon, «The facts on rock music,» Harvest House Publishing House, Oregon, 1992, pág.13-14). Akkan Bloom tiene razón cuando asevera que «básicamente la música rock contiene únicamente un llamado bárbaro: tener sed de sexo. Aquí no hay amor y sí una pasión sexual animal, la más primitiva e ingobernable… Aprovechando su autoridad de industria legal del esparcimiento, la música rock acerca a los niños en una bandeja de plata justamente aquello, contra lo cual prevenían los padres explicando que era prematuro para ellos… Los jóvenes toman conciencia que la música rock tiene el ritmo de la relación sexual…  

Nunca en el pasado existió un arte dirigido tan evidentemente a la perversión de la juventud.

Las letras de las canciones describen directa u oblicuamente actos de satisfacción de los deseos sexuales y presentan estos actos como totalmente naturales y legítimos para ellos. Y esto se le ofrece a jóvenes que no han terminado de alcanzar los conceptos más elementales sobre el amor, el matrimonio y la familia. Esta música tiene más influencia sobre los jóvenes que la pornografía abierta. La gente joven ya no tiene necesidad de observar como se comportan los adultos. Ahora están en condiciones de probar todo eso. Dejemos a los viejos pervertidos que continúen gozando los vergonzosos espectáculos. Ahora la vida activa sexual es el territorio de los jóvenes. Ellos necesitan sólo un incentivo» (Bloom «Closing the american mind» pág. 73-74). La música rock y el frenesí El concierto del grupo «Guns N´Roses» del 2 de Julio de 1991 en la ciudad de Saint Louis en el estado de Missouri finalizó con un espantoso arrebato de 2500 jóvenes totalmente descontrolados, que tuvo 60 víctimas. La revista «Rolling Stone» anunció que los participantes de este concierto «llegaron a un estado de furia, tiraban botellas, rompían los asientos, arrancaban arbustos, incendiaban y rompían instrumentos musicales… La masacre duró mas de una hora hasta que apareció una división especial de la policía e impuso el orden («Rolling Stone», 22 de Agosto de 1992, pág. 15). Semejante conducta está lejos de ser el único caso.

Estos estados de furia en los conciertos de rock a veces llevan incluso a homicidios.

En la ciudad Jefferson-Township del estado de New Jersey, el joven Thomas Sillivan apuñaló a su madre Betty Ann en el sótano de su casa. Luego prendió fuego el diván con el fin de incendiar la casa y matar a su padre y a su hermano menor, se escapó de la casa y se suicidó cortándose las venas de sus brazos. Toda la semana anterior Thomas canturreaba una canción de rock sobre la sangre y el asesinato de la madre. Mas tarde la policía determinó que Thomas era un estudiante talentoso, excelente deportista y scout que de alguna manera empezó a fascinarse con la música «heavy metal.» Antes de la tragedia les comunicó a sus amigos que Satanás se le presentó y le ordenó matar a su familia. Distintas formas de violencia abundan cada vez más en la música rock. Así por ejemplo, en la canción titulada «Yo mato a los niños» del coro «Dead Kennedy» escuchamos: «Yo mato niños. Yo admiro cuando ellos mueren. Yo mato para obligar a llorar a sus madres. Los aplasto bajo las ruedas de mi automóvil y con placer escucho sus gritos. Los alimento con caramelos envenenados y estropeo su fiesta de Holoween. Mato niños golpeando sus cabezas contra las puertas. Mato a los niños y con impaciencia espero llegar al vuestro». En el álbum «Hell Awaits» la orquesta «Sleyer» escuchamos el llamado: «Sin ningún tipo de motivo real simplemente mata y vuelve a matar. Aún si sufres mis brutales cortes te voy a perseguir hasta el final». En el disco de «Iron Maiden» el héroe de la canción Eddy es una persona que mata con enorme placer.

De acuerdo a los especialistas en satanismo, la canción del disco «AC/DC» titulado «Night Prowler» (Depredador Nocturno) inspiró al asesino Richard Ramírez a matar a cerca de 30 personas. En esta canción hay palabras como estas: «nadie te va a prevenir, nadie va a gritar «¡Alerta!» antes de que no sientas que el filo de acero sobresalga de tu espalda. Soy el depredador que te está cazando».

Una de las investigaciones demostró que de las 700 canciones más populares de «heavy metal», el 50% habla de asesinatos, el 35% de satanismo y el 7% de suicidio. La profesora de letras de la Universidad de Nueva Tork Sheila Davis está convencida que «es imprescindible prestar la más seria atención al contenido de las canciones más populares y tener en cuenta no sólo a que llaman a la sociedad, sino sobre todo a los resultados que tienen estas inspiraciones» (USA Today, 11 de Octubre de 1985, pág.10). Paralelamente con la agresividad destructiva hacia el exterior el ánimo puede orientarse contra el mismo oyente. Algunos compositores de música rock hacen propaganda del suicidio con insinuaciones o más directamente. Así, por ejemplo el compositor Ozzy Osbourne en la canción «Suicide Solution» dice: «el suicidio es el único camino hacia la libertad». En la canción «Suicide’s Alternative» se canta: «la vida me aburrió, es insoportable. Estoy aplastado y cansado y a nadie le concierne. Me doy asco a mí mismo —no quiero vivir, me aburrió la vida— es tiempo de morir. El suicidio es la salida». «Sacrifica la vida y suicídate. ¡Si haces esto en nombre de Satanás serás inmortal como él!», le cantan en un cancioncita dedicada a Lucifer un grupo de «heavy metal».

Las investigaciones del Dr. en psicología Hannelore Wass, reconocido especialista en el ámbito del proceso de morir, demuestran que aunque solamente el 17% de la juventud escucha música con obvio contenido de destrucción, entre los jóvenes delincuentes la cantidad que escucha este tipo de música es del 40%. Además de esto, casi la mitad de los encuestados reconoció la posibilidad de que semejantes canciones pueden realmente inclinar hacia el suicidio a jóvenes no equilibrados o abatidos por la tristeza. Como resultado de esta encuesta a jóvenes, el Dr. Wass concluyó que es muy importante que los padres controlen lo que escuchan sus hijos y presten atención a la posible aparición de algún síntoma anormal (Wass, et al., «Adolescents´ Interest», pág.186, se encuestó a 700 jóvenes sobre asesinato, suicidio y satanismo. Cf. Aerosmith´s «Janie´s Got a Gun»). Semejantes investigaciones empujaron a que la sociedad National Educational Association concluya que cerca de 6.000 suicidios de jóvenes en el año se deben a la influencia de música nihilista y fatalista (Information for Parent´s Music resource Center, Nashville, TN., 1990).

El reconocido psiquiatra de la ciudad de Palm Spring del estado de California Dr. Morton Kurlan, que tuvo un paciente que se suicidó luego de escuchar a Ozzy Osbourne, manifestó: «Sin lugar a dudas el sadomasoquismo, la sangre y la violencia aportan grandes dividendos a los productores de discos y videos de la música rock. Pero estas producciones son capaces de empujar hacia el abismo a un joven emocionalmente no equilibrado» (Artour Lyons, «Satan wants you»; New York: Mysterious Press, 1988, pág.171). Como se sabe millones de jóvenes contemporáneos sufren desórdenes internos. Aquí conviene tener en cuenta que la alienación, el estado nihilista y destructivo del estilo de la música rock refleja realmente el ánimo real y la vida de las estrellas de rock.

Por ejemplo la biografía de Pink Floyd «Saucerful of Secrets», escrita por dos miembros de este conjunto, trae ejemplos claros de tragedias personales en la vida de aquellos que aprueban los excesos (Cf. the 1991 Elton John interview with David Frost). Los autores Schwarz y Empey observan: «La conversación con ciertos músicos involucrados en el satanismo, como así también las reuniones con especialistas, investigadores y psicólogos, que nos han asesorado, dibuja claramente el siguiente cuadro. Todos los que prefieren el satanismo al Cristianismo, tienen sed de satisfacer inmediatamente sus deseos: dinero, poder y vida descontrolada. Muchos de las estrellas del rock interrogadas sueñan vivir en un mundo de fantasía de incalculable riqueza y están de acuerdo en morir jóvenes como pago por haber recibido esos bienes». La realidad de semejantes expresiones es evidente con el conocimiento de las necrologías de las estrellas del rock.

Muchos entre ellos han muerto prematuramente por el alcoholismo, las drogas o por accidentes provocados por esos abusos. (Schwarz and Empey, «Satanism: is your family safe?» pág. 154). Los mismos nombres de los grupos de «heavy metal» (también conocidos bajo el nombre «metal de la muerte») hablan de la glorificación de la muerte y la destrucción. He aquí algunos ejemplos: Blessed Death, Carnivore, Coroner, Destrucción, Mace, Malice, Overkill, Rotten Corpse, Sacrifice, Violence, etc. (Cf. Dave Hart, «Heavy metal madness,» Media Update, Jul/Ago. 1989, pág. 5). La revista de la Asociación Médica de USA escribe: «El contenido destructivo y sexual de los videos de la música rock perturba a muchos. Una de las investigaciones mostró que de 200 videos observados la violencia predominaba en un 57% y las escenas sexuales en un 75%… La mitad de las mujeres que actuaban en estos filmes, estaban vestidas provocativamente… Hay fundamentos para ver una relación directa entre el contenido destructivo de los videos y la posterior conducta agresiva de los jóvenes».

En este mismo artículo se traen ejemplos de asesinatos brutales como resultado del encantamiento del «heavy metal.» Aun más, a veces los actos delictivos eran realizados inmediatamente después de ver los videos de rock. El Dr. Gerbner y sus colaboradores ven una influencia negativa en semejantes videos y música en las interrelaciones entre la gente en la sociedad contemporánea (Brown and Hendee, «Adolescents and their music», págs. 1661-62; Wass et al., «Adolescents´Interest,» King, «Heavy Metal Music»). Un psiquiatra del estado de Tennessee anunció ante la comisión senatorial que el «heavy metal» se manifiesta como un veneno para la gente joven inmadura, como así también para gente que mal utiliza métodos estimulantes. «Esta música es semejante a agregar combustible a una llama que arde con el odio y el resentimiento», dijo el Dr. Paul King, profesor-asistente en la clínica infantil de psiquiatría ante la Universidad de Tennessee. De acuerdo a las palabras del Dr. King, el 80% de sus jóvenes pacientes escuchaban diariamente música «heavy metal». No hay dudas que la blasfemia, la vulgaridad, la depravación y la violencia propagadas por la música rock contemporánea.

El rock y los narcóticos Además del sexo y la violencia, la música rock contribuye al consumo de narcóticos. Ya en 1969 la revista Times (26 de Sept.) comentaba que «los compositores de la música rock consumen narcóticos en forma frecuente y abierta, su creaciones están llenas de insinuaciones sobre narcóticos». Unas de la investigaciones en Post Graduate Medicine llegó a la siguiente conclusión: «Los hechos corroboran como regla que la música rock estimula el consumo de narcóticos, la relación sexual indiscriminada y el comportamiento turbulento» (King, «Heavy Metal Music»; Cf. Wass, et al., «Adolescents´Interests,» pág. 82). A pesar de que el abuso de los narcóticos representa un problema tan grande en la sociedad contemporánea, la música rock sigue incentivando su consumo. Ya es hora que los dirigentes de la sociedad comprendan que la música rock lleva una importante parte de la culpa en la actual drogadicción.

Rock y satanismo.

Elementos anticristianos del rock Por frases de la música rock se percibe que ella tiene ciertos elementos comunes con la religión. Por ejemplo, esa música reconoce una fuerza superior que dirige el mundo. No obstante rápidamente se hace evidente que aquí no se le canta a Dios como el Ser Superior Bondadoso, ni siquiera al «destino» ciego de los poetas paganos, sino a algo o alguien sombrío y cruel.

En la periferia del curso principal del la música rock hay grupos con una inclinación extremadamente anticristiana. La cacofonía de ciertos grupos de «heavy metal» esta penetrada con motivos de satanismo. Esos sonidos helados empujan hacia el mismo infierno a aquellos que los escuchan. He aquí algunos ejemplos de uso de rituales de la misa negra. Durante el concierto del grupo «Gwart» uno de los participantes cortó la cabeza humana de un muñeco e hizo algo semejante a salpicar con sangre a los espectadores del concierto. Luego miembros del grupo recogían la sangre del muerto y pintaban con ella sus caras y cuerpos y se la tomaban. Después de eso integrantes de la orquesta traían animales a la escena y les arrancaban las entrañas. He aquí un claro ejemplo del carácter diabólico de esta música abiertamenta contraria a Dios y al Nacionalsocialismo, pero a nadie debe sorprender esto, pues gran cantidad de los compositores de música rock son judíos.

Ya en 1966 el judío John Lennon se vanagloriaba de que el Cristianismo iba a pasar y que los «Beatles» iban a ser más populares que Cristo: «El Cristianismo va a desaparecer, va a retroceder, se disgregará. No necesito discutir sobre ésto. Tengo razón y la Historia me dará la razón. Ya somos más populares que Jesucristo. Me pregunto quién será el primero en desaparecer: El Rock ‘n Roll o el Cristianismo». JOHN LENNON (ex-integrante de «Los Beatles»), The Forerunner, Vol. 2, Nov. 1982). No citaremos los posteriores insultos a Jesucristo (John Lennon, «A spaniard in the works,» Simon and Shuster, 1965, pág. 14). Lennon murió trágicamente en Diciembre de 1980. «El Rock siempre fue la música del diablo» manifestó en 1976 el judío David Bowie, una de las más grandes estrellas del rock. De acuerdo a testimonios de la revista «Spin» (Enero 1991, pág. 29), el cantor Danzing en interpretaciones del tipo «I am Demon,» «Mother» y otras parecidas propaga rituales del satanismo y la anarquía espiritual. En uno de los videos blasfemos, una mujer parada ante el pedestal de la cruz mira para arriba y en lugar de ver Cristo, ve la representación del demonio colgado de la cruz con las manos extendidas. Es evidente que el objetivo de esta escena es instigar al espectador a una percepción negativa del símbolo de la cruz.

Es sabido que la música rock desde el principio de su aparición era turbulenta y estaba contra la autoridad de los padres y de la sociedad. Actualmente algunos de los grupos nuevos de rock empezaron a llamar abiertamente el abandono de los principios cristianos. En unos de las más tempranas entrevistas de la revista «Rolling Stone,» David Crosby, del grupo «Crosby, Stills & Nash» comentaba: «Yo decidí que lo más importante será segar a sus hijos. Aquí no hablo de secuestrarlos físicamente. Tengo en cuenta cambiarles la escala de valores, lo que prácticamente los sacará del mundo en el que viven sus padres» (Revista «Rolling Stone,» vol.1, pág.410). Paul Kanter, de la revista «Jesserson Starship» reconoce: «El objetivo de nuestra música es aumentar la brecha generacional, separar a los chicos de sus padres» (In Tingelhoff, Documentation of Expose, pág. 4). Mick Jagger, de los «Rolling Stones» comentó: «No existe una canción de rock inofensiva orientada a la familia» (ahí mismo, pág. 5). John Cougar habla sinceramente: «Yo juro y maldigo (en mis canciones) porque no es aceptado por la sociedad. Odio todo lo que se considera necesario y aceptado. Por eso repudio el colegio, el gobierno y las iglesias» (ahí mismo, pág. 6). El contenido del texto de la canción «Rock and Roll Babylon» actúa opresivamente. La esencia anticristiana de esta más baja forma de cultura surge aquí de la manera más abierta. Comenzando con el disco «The Doors», compuesto por Jim Morrison con su manera burlona de gritar frases de la oración del Padre Nuestro, siguiendo con la canción «Quicksand Jesus», de «Skid Row» («¿nos salvan los santos hipócritas?») y finalizando de una manera más blasfema, la cultura rock descubre francamente su aversión hacia el cristianismo.

Además de atacar al Cristianismo, se ve una clara intención de atacar al Nacionalsocialismo y a Adolf Hitler. Así, Ozzy Osborne confiesa: «Yo no he renacido como cristiano, sino he renacido como Hitler» («Cream Metal,» Marzo 1986, pág. 12). He aquí otras citas del «heavy metal.» En la canción «The oath» del grupo «King Diamond» se anuncia: «Yo repudio al Cristo mentiroso y reniego de la fe cristiana, desdeñando todo su contenido». Y en la canción «Possessed» del grupo musical «Venom» se dice: «Estoy dominado por todo lo que se presenta como malo. Yo exijo la muerte de su Dios. Estoy sentado a la diestra del rey Satanás y tomo el vómito del sacerdote. Fornica con tu lujuriosa moribunda. Satanás es mi amo encarnado. Todos alaben: ¡que prospere nuestro señor malvado!» En «Hymn 43», del grupo musical «Jethro Tull», se canta: «Nosotros somos nuestros salvadores. Si Cristo salva, pues que se salve a sí mismo».

No citaremos más blasfemias de estas canciones por la repugnancia que producen. Muchos de las estrellas del rock exitosas se ocupan tanto del satanismo como del espiritismo. Intentando explicar su propio proceso de «inspiración,» John Lennon decía: «Este estado de ánimo es semejante a estar poseído, parecido a una psicosis o el estado de medium». Yoko Ono sobre los «Beatles» dijo que «eran como médium. No se daban cuenta de lo que hacían, pero aseveraban que ella (esa música) pasaba a través de ellos». Mark Storace, cantante de un grupo de «heavy metal,» en su entrevista de la revista «Circus» dijo: «Usted no puede describirlo exactamente pero puede decir sólo que es similar a una energía misteriosa, que desde una dimensión metafísica entra en vuestro cuerpo. Es muy similar al estado de un médium».

Little Richard experimentó estados similares y señaló a Satanás como su inspirador: «A mí me dirigía y me indicaba una fuerza externa. Esto era la fuerza de las tinieblas […] sobre la cual mucha gente ni siquiera cree. Esta fuerza era el diablo, el mismo Satanás». Jim Morrison (que escribió «The Doors») llamaba a espíritus que lo poseían por momentos «the lords» (los soberanos) y creaba obras poéticas en su honor. La inventiva de la estrella popular del rock Joni Mitchell llegaba a través de un espíritu que la dirigía llamado Art. Ella dependía tanto de ese espíritu que cuando era llamada ninguna fuerza la podía detener. La frecuente influencia de semejantes espíritus sobre los compositores de rock se aleja de casos meramente fortuitos. Fayne Pridgon, ex amiga de la superestrella, el judío Jimmy Hendrix, dijo que «él siempre decía que el diablo o algo parecido habitaba en él de manera tal que él no tenía ningún control sobre sí mismo […] Las canciones por sí mismas fluían de él» (Dave Hunt, America: «The Sorcerer´s New Apprentice,» Eugene, OR: Harvest House, 1988, pág. 239-40). Muchas otras estrellas del rock se ocupaban del ocultismo y describen sus creaciones en términos tanto de posesión como de trance (Larson, «Larson´s Book of Rock,» pág. 125-35; Hunt, America: «The Sorcerer´s New Apprentice,» págs. 245-246). Se sabe que actualmente una gran cantidad de músicos manifiestan interés hacia el espiritismo, la hechicería y a veces incluso hacia el satanismo. Los nombres de algunos grupos del «metal negro» tienen relación con el espiritismo. Así por ejemplo: Coven, Dark Angel, Demon, Infernal Majesty, Possesed, Satan, Cloven Hoof y similares («Details for Men», Junio 1991, págs. 100-101). Ozzy Osbourne una vez destacó: «Yo nunca sabía de antemano que debía crear. Prefiero hacer aquello que los espíritus me sugieren. De esta manera siempre está la posibilidad de culpar a otro» (Faces magazine, Noviembre 1983, pág.24).

Cantante principal en el concierto de «Black Sabbath» en Canadá, Osbourne invocó festivamente a Satanás. «A veces me siento una especie de médium de una fuerza externa», explicaba Osbourne (Tingelhoff, «Documentation of expose», pág. 21). El grupo «Black Sabbath» invoca a Lucifer en sus conciertos (misma fuente). Así también en «Master of reality» ellos cantan que él es «el señor de este mundo» y «el confesor contemporáneo». De acuerdo a la entrevista de Peter Criss, el principal percusionista del grupo «KISS,» le dijo a la revista «Rolling Stone»: «Yo tanto creo en Satanás como en Dios. Uno puede dirigirse a cualquiera de ellos para el logro de sus objetivos» («Rolling Stone, 12 de Enero de 1978, ingenuamente se puede pensar que el nombre KISS se refiere al beso pero en realidad es el acrónimo de: «Reyes al servicio de Satanás»). A otro guitarrista le preguntaron: «¿De donde sacan fuerzas para tal interpretación?» — «Seguro de abajo», contestó él. «Allá arriba no hay rock and roll!» Los participantes del grupo «Iron Maiden» reconocen que se dedican al espiritismo, incluyendo la hechicería (Cream Metal, Septiembre 1982). Uno de los conciertos de este grupo en Portland, estado de Oregon, fue abierto con estas palabras: «¡Bienvenidos al santuario de Satanás!» Describiendo el concierto Van Halen, David Lee Roth comentó: «Les daré a ellos mi alma. Esto es justamente lo que pretendo hacer. Cuando el hombre consigue tal altura, está dispuesto a caerle suplicando a los dioses demoníacos» (Rock, Abril 1984).

El guitarrista del grupo «Motley Crue» Mick Mars describe abiertamente a su grupo como demoníaco (Heavy Metals Times, Mayo 1983). Nikki Sixx decía sobre su concierto «Shout at the Devil»: «Sobre la escena utilizamos pentagramas, calaveras, representaciones de la cabeza de chivo con cuernos, cruces dadas vuelta y otros símbolos del satanismo […] Siempre he cortejado con el diablo» (Circus, 31 de Enero 1984). Entre los amantes de la música «heavy metal» no es poco frecuente que lleven puestos amuletos y símbolos descritos más arriba. El nombre «Zoso» significa el perro de tres cabezas que cuida las puertas del infierno, la palabra «Natas» es el anagrama (palabra escrita al revés) de Satanás. La representación de «Il Cornuto», con el dedo índice y meñique estirados, es el símbolo de Satanás, el macho cabrío.

MENSAJES SUBLIMINALES Y EL SATANISMO

Si fuésemos nosotros quienes tildáramos a los autores e intérpretes de estos temas, de anticristianos o demoníacos, tal vez se nos censuraría por juzgar prematuramente o con parcialidad, pero tenemos sus propias opiniones, incluso hace ya muchos años, el caso de Ozzy Osbourne, en el sobre del LP «Reflections»: Les recuerda el año 1969 cuando funda el grupo Black Sabbath. Ya en el primer LP, conjuraban a Satán, quien en efecto acudía realmente. Les prometía éxitos en el mundo entero, a condición que actuaran cada año en el día del gran Sabbath. Hasta la fecha ambos han mantenido su palabra […] «Y tú hombre loco, que tienes este L.P. en tus manos, has de saber que con ello HAS VENDIDO TU ALMA, ya que pronto serás atrapado por este ritmo infernal y por la fuerza diabólica de esta música…»

«Nuestra música puede causar una inestabilidad emocional, un comportamiento patológico, incluso la rebelión y la revolución». Los Beatles, «Satan’s music exposed».

«Nunca he compuesto o cantado una sola canción que no haya sido escrita en lenguaje de brujería». Elton John.

«Trabajamos siempre para dirigir el pensamiento y la voluntad de las personas, y la mayoría de los otros grupos hacen lo mismo». Mick Jagger, de Los Rolling Stones.

«Sé que Los Beatles tendrán un éxito como ningún otro grupo ha tenido. Lo sé exactamente porque para ello he VENDIDO MI ALMA AL DIABLO«. John Lennon, Pop Magazine Nº. 23, 1976.

La sola lectura de esta exposición de ideales por parte de los fundadores del movimiento Rock en el mundo y otros tipo de música debería bastar para alarmarnos lo suficiente como para estar en guardia.

Conclusión

Por lo general desde los tiempos más remotos la música expresaba los más altos y nobles sentimientos del compositor. Pacificaba, alegraba e incluso le facilitaba un estado de oración al oyente. La música, como la poesía, siempre reflejaba algo elevado, «algo no de este mundo,» el don de crear. Leemos en el libro de la Revelación (el Apocalipsis) que los ángeles y santos glorifican a Dios con su canto en el cielo. Pero, ¿existe la música en el infierno? Si existe, seguramente se asemeja al rock contemporáneo y al «heavy metal.» Llegas a esta conclusión cuando ves los turbulentos y frenéticos sentimientos sexuales que despierta. Esa música hace crecer desde el fondo del alma de los oyentes las características más obscuras. Se recuerdan las palabras del libro de la Revelación: «¡Ay los habitantes de la tierra y del mar! Porque el diablo descendió hacia vosotros repleto de un gran furor, consciente de que tiene poco tiempo» (Apocal. 12:12). Un hombre agudo espiritualmente no puede dejar de ver la influencia del diablo sobra la música contemporánea, el contenido de los programas de televisión y el cine y la creciente popularidad del espiritismo y la astrología. Los tentáculos del príncipe de las tinieblas penetran cada vez más profundo en la vida de la gente contemporánea. «¡Por sus frutos los reconoceréis!» No es de extrañar que bajo este imperio del mal se ataque virulentamente a Adolf Hitler, al que se demoniza de forma ridícula y quien precisamente combatió a las tinieblas. Se pretende crear confusión y mostrar una imagen falsa y absurda de Hitler.

Es la «democracia parlamentaria» la que mejor se ajusta a los fines del judaismo y de Satán, pues ésta ha derribado el orden y la estabilidad social que da la familia. Nunca hubo tanto ateismo y tanta inmoralidad como en la actualidad. Al Nacionalsocialismo no le pueden perdonar haberse alzado contra el imperio del mal, contra el poder del judaismo. Los niños y los adolescentes son los principales «consumidores» de la música turbulenta contemporánea. Por supuesto la mayoría no penetra en el significado da las palabras y sugestiones de la música que les atrae. Su raciocinio todavía no está lo suficientemente desarrollado para comprender las alegorías sexuales, los diversos términos de perversión y las insinuaciones ocultistas de tales canciones. Tampoco llega a su consciente el simbolismo satánico de esa música. Ellos simplemente están sedientos de estímulos fuertes, algo nuevo que los atraiga y el ritmo estimulante de la música rock concuerda con los instintos animales de su naturaleza. De acuerdo a la conclusión de los representantes de la American Academy of Pediatrics (AAP), la mayoría de las creaciones de la música y videos de rock contemporáneos amenaza la salud psíquica de los niños y adolescentes en una mayor medida que la poliomielitis hacía unos años atrás. Los representantes de la AAP son de la opinión que la prolongada audición de la música «heavy metal» puede mutilar espiritualmente al joven y dejar cicatrices incurables en su psiquis.

Fuente: EUSKALHERRIA NS


Ratzinger: ‘El rock duro debe ser purificado de mensajes diabólicos’ (04/20/2005 – 07:06:00 – Radioacktiva)

El rock duro y la iglesia católica sólo tienen en común los crucifijos que se ponen algunos artistas. Eso, y las nuevas bandas autodefinidas como «de rock gótico-cristiano». Pero en general, los mensajes de las letras de las canciones suelen ser contrarios a la doctrina de la organización religiosa. Por eso, el actual Papa, Benedicto XVI, por aquel entonces Joseph Ratzinger, dijo en 1994: «El rock duro debe ser purificado de mensajes diabólicos». Lo expresó en el día de Santa Cecilia (protectora de los músicos) durante una misa celebrada en la iglesia de San Carlo en Roma, el 22 de noviembre de aquel año.
En la música, añadió, «hay muchas cosas buenas, pero ocurre que en ciertas ocasiones el rock duro no es apto para las iglesias».

Volvería a reincidir en el tema en el libro Introducción al espíritu de la liturgia, en febrero de 2001: El rock es expresión de pasiones elementales, que en las grandes reuniones de música tienen una relación de carácter cultural, esto es de contracultura, que se opone al culto cristiano, mientras el pop es un culto de la banalidad». Nadie se libra.

«El rock quiere liberar al hombre de sí mismo en el evento de masas y en el desarreglo mediante el ritmo, el rumor y los efectos luminosos, haciendo precipitar a quienes participan en el poder primitivo del Todo, mediante el éxtasis de la laceración de los propios límites».

Mientras, el guardián de la doctrina católica habla del rock y del pop en su libro en el capítulo dedicado a Música y liturgia, en el cual resalta la importancia de la música en la Biblia y en la tradición cristiana.

Tomado de 40 Principales España.


En contra de esta opinión habla Pío Moa: Juventud manipulada

Un fenómeno visible en Cataluña, Vasconia y Galicia, es la llegada a la edad de votar de promociones de jóvenes formados en el nacionalismo. Estos jóvenes, con el ardor y la inexperiencia propios de la edad, tienden a mostrarse radicales y exigentes, y su influencia sólo los necios pueden menospreciarla. Ahora mismo, en Cataluña, esa juventud manipulada ha aupado a los secesionistas no disimulados, y puede convertir a ERC en árbitro de la política regional, creando una situación sumamente inquietante. Acierta Mayor Oreja al señalar que esa es la verdadera herencia de Pujol, aunque se queda corto: es también la herencia de un PSOE y una derecha españolas que han permitido esa deriva con necia pasividad y hasta con sonrisa complaciente.

El problema no es nuevo. España ya sufrió, especialmente en 1923, una ofensiva concertada de los balcanismos, que, junto con el terrorismo y la campaña de destrucción del régimen liberal aprovechando la guerra de Marruecos, amenazaba no sólo a la Restauración, sino también la integridad de España. Resumiré aquella olvidada crisis, porque muestra hasta qué punto es difícil aprender de la experiencia.

Lo propio del momento fue que los secesionistas vascos, gallegos y catalanes, muy animados por la impresión de decrepitud que ofrecían los sucesivos gobiernos, unieron por primera vez sus fuerzas en un pacto, llamado de la Triple Alianza, para propiciar «la acción conjunta y mutua ayuda en la campaña por la libertad nacional de los tres pueblos?, y exigir «la plena soberanía política?. A ese fin reclamaban «el derecho a la apelación heroica para el caso de que la voluntad nacional de los pueblos de Cataluña, Euzkadi y Galicia siguiese desconocida y pisada por el Estado español?, llegando, si preciso fuere, a «mezclar la sangre [de vascos gallegos y catalanes] en el sacrificio?.

El pacto, pues, era abiertamente secesionista y dispuesto a la acción armada, y creaba una situación nueva. Nada en común con las estrategias de Cambó, en cuyo «tablero de ajedrez Cataluña, Euzkadi y Galicia eran piezas de la España grande?, señalaba el 10 de septiembre La Publicitat, órgano del nacionalismo radical catalán. Ahora luchaban «no por el engrandecimiento de España, sino por la libertad nacional de los tres pueblos amigos y aliados?.

Los firmantes rebosaban optimismo. Como decía Aberri el día 12, «Cataluña vibra hace tiempo en ansias de libertad. Euzkadi se yergue altiva y cada día más brava contra el dominador; Galicia no se resigna?. En Vasconia y Cataluña, en menor medida en Galicia, proliferaban actos, conferencias, campañas de agitación e información en la prensa. «El entusiasmo despertado con este motivo es grandioso, justificado por la enorme trascendencia de acto tan importante como la celebración de la alianza ofensiva-defensiva entre Galicia, Cataluña y Euzkadi, cuya acción mancomunada cambiará, tal vez muy pronto, los destinos de las tres naciones?, cantaba Aberri, el día 7. Gallastegui, un líder del PNV, pronosticaba: «Euzkadi es hoy esclava, mas pronto será libre y gloriosa?.

El pacto de la «Triple Alianza? se firmó el 11 de septiembre, aprovechando la Diada, y se registraron tumultos y gritos de «¡Muera España!? y «¡Muera Castilla!?, protagonizados por las juventudes partidistas. La preocupación suscitada queda reflejada expresivamente en comentarios como éste de La correspondencia de España sobre «los excesos de una juventud educada en principios absurdos, envenenada por propagandas de abominable separatismo. Se ha ido en la condescendencia más lejos de lo que era prudente, y hoy empieza a divisarse cuál puede ser el porvenir (…) Los nacionalismos del norte se robustecen y avanzan, acusando cada día mayor gravedad?. O este otro, de La voz de Guipúzcoa: «¿Qué otra cosa sino sonreír puede hacerse ante quienes se proclaman víctimas de la tiranía de un Estado que les consiente vejar el nombre de la patria y subvertir sus más fundamentales instituciones? (…) A nuestra risa se mezcla un poco de dolor, porque pensamos en los payeses y en los casheros, en los hombres del agro y del taller a quienes se capta con apóstrofes, con sentimentalismos, con imprecaciones, con todo menos con argumentos. Y en este aspecto nos parece reprobable la pasividad gubernamental ante los energúmenos que dan mueras a España?.

Nada nuevo, por tanto, ni en la táctica de los balcanizantes ni en la pasividad de los gobiernos. Los historiadores no suelen dar importancia a aquella experiencia porque pocos días después el golpe de Primo de Rivera cambió totalmente la situación. Cambó señala que la causa principal de la dictadura fue el intolerable terrorismo en Cataluña, pero Primo mencionó también, en primer plano, el auge de los separatismos.