La pornografía es mala porque hace mucho daño. Ahora te explico…

Una pausa para entenderla. Un sacerdote explica las consecuencias sociales y personales.

Puntos de meditación

Como hoy día la gente que navega por Internet no tiene tiempo para largos razonamientos vamos a exponer una serie de puntos para la meditación:

Esas fotografías reflejan una situación contraria a la dignidad humana

  • es mala para los seres humanos que aparecen en ella.
  • es mala para el que la ve
  • es mala para el empresario que gana su dinero de esa forma
  • es mala para la sociedad

Ésta va camino de convertirse en una plaga. No hay un final del túnel, no tocaremos fondo. Las imágenes explícitas destruyen la relación con Dios, destruye la familia, los sagrados vínculos de la familia son destruidos por la seducción de esas imágenes.

Es causa de terribles aberraciones porque el pobre ser humano atrapado en sus garras siempre necesita más cantidad, nuevas experiencias, cada vez más pervertidas.

La adición a esas fotos y los actos que entrañan es cierta: 

  • esclaviza a unos seres humanos sobre otros
  • esclaviza a las sociedades

En ella ya no vemos a un ser humano, vemos un trozo de carne. Ya no somos hijos de Dios, sino animales. El acto de amor dentro del matrimonio es una cosa totalmente distinta. Hace de nosotros animales (y los animales no hacen lo que se enseña en esas imágenes). La castidad hace de nosotros ángeles. Abrazar la castidad es como la decisión de dejar de fumar, o se decide dejarlo del todo o no.

Pero si no se deja siempre se necesita más. Hay una espiral descendente, cada vez más, cada vez más pervertida. Es necesario advertir a la sociedad porque la cosa va a empeorar. Mucha gente es débil pero en el fondo de sus corazones saben que esto es verdad. Lo malo es que mucha gente ya ni siquiera ve la verdad.

Algunos burlonamente nos pueden preguntar:

¿Lo que nos está diciendo es que usted tiene la verdad y que nosotros estamos equivocados?

Hay que responderles:

Sí, exactamente, exactamente eso.

Para mí, como sacerdote, lo terrible, lo que nunca hubiera imaginado ha sido el encontrar a padres de familia con hijos que abandonaron su familia porque las fotografías del acto marital o no, explícitas, les llevó a experimentar más y más cosas, cayendo finalmente en la homosexualidad.

Está contaminando a muchos cristianos. Muchos cristianos no se animan a hablar contra la pornografía en los medios de comunicación porque consideran que es algo que tiene que ver con la libertad humana. Cuando la pornografía lo que hace es quitar esa libertad. La sociedad menos libre acabará siendo la más pervertida.

A nadie le queremos quitar la libertad, pero el Estado es el que decide qué se puede vender y qué no se puede vender. Del mismo modo que no se permite atentar contra el honor de alguien, hay que entender que la pornografía atenta contra la dignidad del ser humano que aparece en esas fotos o películas. Nadie debería aceptar dinero por hacer ese trabajo, no es un trabajo.

Algunas enfermedades venéreas son de apariencia tan horrible para mostrar lo mucho que nos debemos alejar de ese pecado.

Mucha gente piensa: hoy día todo se cura. Están muy equivocados: la gonorrea, el herpes, el molusco contagioso y por supuesto el sida no se curan. La misma sífilis en determinados grados es actualmente incurable y terrible en su acción sobre los órganos y el cerebro.

Hay que advertir a nuestros conciudadanos de la otra cara de la historia. Ni siquiera saben que existe otra cara de la historia. Salvad a la gente del infierno. Salvad sus almas. El pecado lleva al infierno. Dios os puede sacar de esto. Dios os puede restaurar.

Disfruta de todo el contenido en esta excelente página personal del sacerdote José Antonio Fortea Cucurull (Barbastro, España, 1968) (es sacerdote y teólogo especializado en demonología).